Tanto buscar sin encontrar la fòrmula.
tanto camino recorrido y creer que no la merecemos.
Se nos niega y juega con nosotros, nos provoca
al venir disfrazada.
Esos buenos momentos que nos ha regalado los
atesoramos como si fueran los ùnicos y los ùltimos.
Pero...al observarla detenidamente la vemos ahì,
bien al alcance de nuestras manos y nos llama,
siempre nos ha llamado, nuestros sentidos no la
han escuchado, rebeldes siguieron otros rumbos.
felicidad...de a ratos te escucho , te veo y te siento.
Creo que deberìa estar màs atenta, mas observadora,
màs receptiva,quizàs màs yo.
mcd.
La primavera del alma no se explica en invierno...solo se siente
no necesita palabras cuando el frìo arrecia afuera,
su calor inunda el cuerpo.
Todo se muestra en silencio y vale màs que todo un mundo
de abecedarios.
El esfuerzo por querer ocultar se vè nulo ante la mirada.
No es necesario decir, solo mirar, observar,la piel siente,
la sonrisa se vè, el andar se nota...
La primavera del alma no debe cambiar, es preciso que
no cambie, es el lugar donde nadie tiene derecho a interrumpir.
Las primaveras del alma se unen y en esa uniòn encierran la fuerza.
mcd.
